Definir las tareas y resultados de la red.
Las actividades dependen del propósito de la red, es decir, deben ser relevantes para los objetivos comunes con una definición clara de los resultados. Para tener éxito, las redes deben estar activas y tener planes de acción y direcciones claras que deben generarse desde dentro de la red. Los miembros deben comprometerse a desarrollar productos y los líderes, a su vez, no deben esperar demasiado de los miembros.
Dependiendo de la naturaleza de la red, es necesario que se realicen reuniones periódicas, ya sea cara a cara o electrónicamente, y se debe desarrollar y distribuir información periódicamente.